​Culpables o responsables de la debacle en la aviación nacional

Después del año 2007, que es cuando la República Dominicana recupera la categoría 1, luego de haber permanecido en categoría 2 por un periodo de 14 años, lucha a pasos agigantados en el periodo de gobierno del Presidente Luis Abinader para volver a conseguirla.

La categoría 2, según el criterio de la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA) y la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), se implementa cuando las regulaciones del país categorizado o sancionado, no cumple con los requisitos necesarios para supervisar de forma adecuada las operaciones de las líneas aéreas de conformidad con los estándares internacionales mínimos de seguridad, por ende, los países que son sancionados con la categoría 2, son impedidos de volar de forma comercial hacia el territorio norteamericano si es el caso de que la suspensión venga de parte de la FAA y hacia Europa si es por parte de la EASA.

Las acciones de nuestros funcionarios ya sea por desconocimiento o de forma malintencionada, como lo es la firma de acuerdos internacionales por parte de organismos que no están facultados para tales fines por la ley 491-06 de aviación civil, como por ejemplo la Junta de Aviación Civil (JAC), que ha estado firmando acuerdos internacionales que a nuestro entender carecen de validez, el Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC), que hoy en día sostiene una posición jurídica en la persona de su Director interino, posición que no existe en la Ley 491-06, pero que hasta el momento es quien dirige la institución por parte de nuestro gobierno constitucional, y a pesar de expresar su deseo de querer hacer las cosas bien, la lentitud con la que se desarrollan ciertas acciones a lo interno de la institución que luego de dos accidentes grandes de aviación, no ha reaccionado de forma correcta, manteniendo a los responsables en sus posiciones como si nada hubiese ocurrido, así como mantienen en posiciones relevantes a personas que expresan abiertamente que los profesionales dominicanos realizan según su amplio entender durante más de 20 años, fraudes con los resultados médicos sin poseer consigo ninguna prueba de lo expresado y que aparte de esto no cumple con el perfil para la posición que está designada como es el caso de la psicóloga encargada del departamento de medicina aeronáutica, la otorgación de una avalancha de convalidaciones de licencias a las empresas ARAJET, RED Air, SKY HI y al nombre comercial SKY CANA que opera bajo el AOC de AIR CENTURY de personas de nacionalidades que no son recíprocas con nuestro país como lo establece el Convenio sobre Aviación Civil Internacional también conocido como Convenio de Chicago, la permisión de traer profesionales de poca experiencia al mando de aeronaves y no instructores para que preparen al personal local en un corto periodo como lo establece la Ley 491-06 de aviación civil, y bajo las recientes declaraciones del Director Interino de que desde su llegada a la institución hace ya casi tres años él ha notado que carecen de personal técnico suficiente para realizar los trabajos, eso da pie a los organismos internacionales de fijar sus miradas en nuestro país, como la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y calificarnos muy mal en sus auditorias como ha venido sucediendo.

La permisión de que la Línea Aérea RED Air quien tiene en el país menos de tres años de operación, recientemente publique que están buscando técnicos aeronáuticos en el país que posean el curso del fabricante de los motores JT8D-200 series y a la vez una experiencia mínima de 3 años trabajando con dicho motor, no es más que la mala intención de justificar traer personal extranjero para que el IDAC continue con la avalancha de convalidaciones de licencias a personal que no es necesario, ya que, si el IDAC hubiese realizado su labor de exigir a las empresas que realicen sus obligaciones como lo establece el código laboral dominicano, todo empleado posea o no el entrenamiento de un sistema, cuando entra a laborar a una empresa nueva, dicha empresa debe dotar a dicho empleado nuevamente de ese entrenamiento, por ende, desde que los equipos DC-9 y MD-80 llegaron al país con la desaparecida PAWA Dominicana, tendríamos técnicos preparados con mas de 10 años de experiencia en los diferentes sistemas de estos equipos, pero a los directivos de estas empresas les es más fácil y económico solicitar al IDAC que al parecer desconoce sus funciones primordiales, una convalidación de licencia para traer al país personal extranjero, que enviar al personal local a especializarse como establecen las leyes dominicanas que ellos no cumplen y los técnicos del Instituto Dominicano de Aviación Civil permiten.

Por su parte el Diputado oficialista por la provincia La Altagracia Ing. Francisco Antonio Solimán Rijo, quien no es técnico en materia de aviación y por lo visto tampoco se ha asesorado por ningún técnico en la materia, con intensiones macabras para el sector aéreo nacional, somete un proyecto de ley que introduce modificaciones a la Ley 491-06 de aviación civil de la República Dominicana, refiriéndose a la modificación de los Artículos 120 al 122 que son los únicos artículos que protegen a los ciudadanos dominicanos a poder laborar en el sector aviación dentro de su propio país, pretendiendo otorgar libertad para que sean traídos al país técnicos foráneos a ocupar las plazas en detrimento de los profesionales locales, en contra del código laboral dominicano, la misma Ley 491-06 y la ley de migración nacional, lo que debería ser categorizado como alta traición a la patria y persona no grata en nuestro país, debiendo dicho proyecto de ley ser anulado en el Congreso Nacional de forma inmediata.

La Asociación Dominicana de Líneas Aéreas (ADLA) que solo tiene voz para solicitar incentivos para sus empresas y rebajas de aranceles, no son capaces de luchar en contra de la otorgación de cielos abiertos que viene promoviendo su vicepresidente por creerse beneficiario de dicho acuerdo a través de la empresa ARAJET o Dominican Wing, la cual según el Departamento de Transporte de los Estados Unidos NO es Dominicana, y que dichos acuerdos de cielos abiertos, otorgando 5ta, 6ta y 7ma libertades del aire a potencias como Canadá, Europa y Estados Unidos no beneficia de ninguna manera a las empresas dominicanas y dichos acuerdos de concluirse su otorgación, contribuirán con la destrucción de las empresas locales existentes.

La Asociación Nacional de Pilotos (ANP), recientemente de forma poco transparente al igual como se instauró hace ya dos años, acaba de realizar nuevas elecciones, quedándose al frente de dicha entidad la misma y única plancha presentada para unas elecciones, en contra a lo establecido en sus estatutos.

Nos interesa sobremanera saber cuál es el objetivo a seguir de las personas que desean permanecer al frente de dicha entidad, ya que desde hace dos años no hacen nada a favor de su gremio y permiten que todo lo antes expuesto suceda sin darse por enterados, ya que el 90% de los directivos de la ANP vive en el exterior incluyendo a su presidente, entendemos que por el bien del gremio deberían reflexionar en su accionar para que no sigan siendo cómplices de la catástrofe que están permitiendo ocurra en el sector aéreo nacional, debiendo también mencionar la permisión de una excesiva cantidad de licencias convalidadas a personal técnico extranjero que ya hoy en día no son necesarios sus servicios dentro de nuestro país porque violan la actual Ley 491-06 de aviación civil, el código laboral dominicano y las leyes migratorias de nuestro país sin expresar absolutamente nada en contra de este suceso.

Un Ministro de Turismo, que según respuesta recibida mediante la ley de acceso a la información pública, se paga sus propios viajes de trabajo hacia el exterior, viajando de forma excesiva por líneas aéreas de vuelos chárter, cosa que ni el mismo presidente de la República realiza, obedeciendo exclusivamente a un sector, que solo le interesa que al país ingresen personas de cualquier forma pero sin preservar a las líneas aéreas nacionales, siendo este quien lleva de la mano al Director Interino del IDAC y al Presidente de la JAC a realizar por ser desconocedores del sector, acciones que no les corresponde y que van en detrimento de la aviación nacional.

A todos los sectores involucrados, no busquemos culpables ni responsables, ayudemos al Señor Presidente Constitucional de la República Dominicana Luis Rodolfo Abinader Corona, quien tampoco es experto en materia de aviación, hacer las cosas bien, señor presidente, por favor escuche este clamor nacional, déjese asesorar por técnicos del sector que nos duele hacia donde se están dirigiendo los destinos de la aviación nacional y el futuro de la clase técnica joven de nuestro país, y reciba una comisión de profesionales del sector aéreo nacional, aunque no pertenezcan a la Asociación Nacional de Pilotos (ANP), ya que esta entidad no está realizando su labor, antes de seguir enterrando lo poco que queda de nuestra aviación y podamos salvar algo de ella, recuerde que a la hora de la distribución de culpabilidad, en el juzgado pueda que ninguno de los sectores involucrados sea culpable, pero responsables seremos todos, VIVA LA PATRIA.